11/2/08

Industia de imagen S.R.L

Apa, apa... no, todavía no empiezo con la historia... van a tener que esperar un poquito más... o pasarme unos Flynn Paff por abajo de la puerta.

Esto es otra cosa...


Esta es la historia de Óscar Petrullio. Probablemente lo conozca, pero no por su nombre. El es "un tipo que pudo". ¿Pudo que? dirán algunos Pudo tener 16 minutos de fama, es decir, ser un poco mas famoso que los demás. ¿De que manera? Che, que preguntones que están... El fue un modelo.

Óscar Petrullio nació aquel día de San Valentin de ese año que nadie se acuerda. Nació en un barrio humilde, factor que hizo que siempre quisiera estar en las tablas.

Te la hago corta. Estaba un día caminando por la calle y un publicitario pseudopalermiense, con sus anteojos color "morado" le dijo... Que presencia que tenés, que "morochez" que aptituS. Vení que te saco unas fotos. Y así se convirtio en la cara de Chapas Gonzalez: Las mejores para su toldo volador. Después de eso no pararon de caerle propuestas de trabajo. Hizo 3 tapas para "Fratacho y algo más", 2 para "Gente de obra" y se ganó el cerezita de oro por su mini participacion en la construcción de la antena parabólica tan famosa del barrio de la boca.

Ahora vive bien, solo que con las secuelas de la fama: se compró una máquina para que cada vez que salga a la calle, lo azoten los flashes, aunque el bien sabe que es una maquinita. Pero es como su mini orgasmo matinal de fama.



Óscar Petrullio, un tipo que pudo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

grandeeeeeeee paaaaaaaaaa!